Entrevista a Mariela, autora de Entre letras y ciruelas

Pato Ediciones: ¡Hola, Mariela! Estamos encantadas de poder realizarte esta entrevista y de que la gente pueda conocer tu pluma por fin, ¿por qué no te presentas y nos cuentas un poco de ti? 

Mariela: ¡Hola! Me llamo Mariela y tengo 19 años. Soy de Madrid y estudio Educación Primaria en inglés en la Universidad Rey Juan Carlos. Me gusta mucho leer y escribir, por supuesto, pero también me encanta ver películas antiguas, escuchar música y pintarme las uñas. Siempre tengo la cabeza en las nubes y tengo un humor un poco raro, o eso me dice la gente.

PE: Entre letras y ciruelas es tu primera novela publicada, ¿qué te llevó a escribirla? 

M: Empecé a escribirla como un relato en el que solo aparecían Inés, Evaristo y la tía Magdalena para un concurso de mi ciudad, pero después me di cuenta de que podía alargarlo para hacer una novela. Estuve bastante tiempo pensando en cómo podía llevar la trama hasta que, después de investigar acerca de lo que ocurría con algunos pueblos despoblados de España, decidí escribirla sobre pueblos, escritores y veranos lejos de los padres.

PE: ¿Nos puedes contar algo de la trama sin hacernos spoilers? 

M: Ni se me da bien hacer resúmenes, ni se me da bien no chafar las historias, así que solo diré que Inés es una chica que se va a pasar el verano en casa de su tía, conoce a Evaristo, Yago y Rafa, y encuentra las cartas inéditas de Elizaga, un famoso escritor del que solo se sabe que ganó un premio literario. Si digo algo más, seguro que se me escapa un spoiler sin querer.

PE: ¿Qué tipo de lectores crees que van a disfrutar más de la novela?

M: Creo que los que más pueden disfrutar de la lectura son aquellos que tengan más o menos la edad de los personajes principales de la novela, entre 13 y 18 años.

PE: La España vaciada, concretamente en Toledo, es el escenario de la novela. ¿Por qué elegiste Toledo? ¿Tienes algún vínculo? 

M: Mis abuelos paternos son de un pueblo de Toledo que se llama Belvís de la Jara. No quise que el pueblo en el que ocurre la novela fuese ese en específico, pero sí que me inspiré mucho en él y en sus historias para escribirlo. Quise que ocurriera en Toledo porque siento ese vínculo familiar, pero además estuve leyendo acerca de los pueblos que se iban quedando abandonados con el paso del tiempo y me pareció muy interesante basar la historia en uno de ellos.

PE: ¿Influye el escenario de la novela en la personalidad de los personajes? 

M: ¡Desde luego! Sobre todo para Inés, Yago y Rafa. No solo están en un ambiente diferente al que suelen estar, sino que además se encuentran con amistades y situaciones nuevas para las que no estaban preparados.

PE: La novela tiene un pintoresco grupo de amigos, ¿están inspirados en personas reales o son de tu propia cosecha? 

M: Diría que la mayor parte de los personajes son una invención mía, aunque me he inspirado en varias personas que conozco para darles más personalidad y hacerlos únicos. Sin embargo, para escribir a Evaristo sí que me inspiré bastante en mis abuelos y en mi bisabuelo. De hecho, el ciruelo está basado en el limonero que tenía mi bisabuelo.

PE: Ya que estamos hablando del proceso de escritura, ¿cuál fue la parte que más te costó escribir? ¿Y la que menos? 

M: Lo que más me costó escribir fueron las cartas. Siempre que lo intentaba, me quedaba insatisfecha con el resultado, y me llevó tres reescrituras hasta que conseguí que fuesen perfectas. La parte que menos me costó fue el final porque supe lo que iba a ocurrir desde el primer momento.

PE: Como hemos dicho, es tu primer libro, ¿cómo ha sido la experiencia? 

M: Escribir esta historia ha sido uno de los momentos más intensos y bonitos que he tenido en la vida. Aunque empecé a escribirla a principios del 2021, no fue hasta el verano que me puse en serio. La verdad es que el no tener ninguna obligación hizo que dedicase casi todo mi tiempo a ella y, al final, eso hizo que conectara mucho más con los personajes y la trama.

PE: La novela fue finalista en el Premio Jordi Sierra i Fabra, ¿nos quieres contar la experiencia del concurso y cómo te decidiste a publicarla después?

M: Conocí el concurso cuando vi en la librería uno de los libros ganadores del concurso. Lo leí, investigué el premio y me decidí a presentarme. Cuando vi que había quedado finalista fui muy feliz porque eso significaba que, aunque no fuese la mejor, mi libro era bueno, aunque en aquel momento no pensé en publicarlo. Después recibí un correo de parte del premio en el que valoraban mi historia y me invitaban a la presentación del último libro de Jordi Sierra i Fabra, donde le conocí y nos animó a todos los que queríamos ser escritores a que nunca nos rindiéramos. Por supuesto, yo le hice caso, y acabé enviándole mi manuscrito a tres editoriales. Una cerró, así que nunca respondieron, pero lo curioso fue que, en el mismo día, ¡las otras dos respondieron! Recibí primero el rechazo (justo antes de un examen, además) y, un poco más tarde, recibí el bueno. Lo cierto es que, de no haber sido por el concurso, no habría tenido la voluntad de terminar de escribir, así que siempre atesoraré mi participación en él.

PE: ¿Estás trabajando actualmente en otra novela?

M: Ahora mismo estoy trabajando en dos novelas: una de fantasía juvenil y una infantil. No sé cuál de las dos acabaré de escribir antes o si siquiera saldrán a la luz, pero ojalá que esta no sea la última vez que podáis leerme.

PE: ¿Qué consejo le darías a otro autor novel que busca publicar su primera novela? 

M: Le diría que, por muy difícil que parezca, no abandone sus sueños. Lleva mucho esfuerzo, mucho dolor y muchos nervios, pero cuando lo consigues es la sensación más bonita que uno se pueda imaginar.

La entrevista termina aquí, pero puedes seguir a Mariela en sus redes sociales y estar atento a novedades.