Una de las cosas a las que te enfrentas una vez has terminado de escribir un manuscrito y quieres mandarlo para probar suerte es a la redacción de una propuesta editorial. Pueden ser palabras aterradoras, sobre todo si es la primera vez. Por eso, en este post vamos a enseñarte cómo preparar una propuesta.
Antes de empezar es fundamental que revises las editoriales a las que vas a enviar tu manuscrito para adecuarte a sus necesidades y peticiones. Si bien la propuesta editorial que hagas te servirá para la mayoría, es cierto que algunas tienen unos requisitos más específicos.
Si un libro fuese una tienda, la propuesta editorial sería su escaparate. Es un anticipo de lo que hay dentro para llamar la atención e interesarse por el contenido.
Se trata de un documento en el que se vuelca toda la información de la novela. Es el primer documento que ve el editor antes de leer al manuscrito, así que es muy importante en el proceso editorial.
En nuestra página de manuscritos tenemos una plantilla descargable para poder completar la propuesta editorial. No dudes en usarla si la necesitas.
Podemos dividir la propuesta editorial en tres grandes bloques.
Es lo primero que se ve al entrar en la propuesta editorial y abarca los aspectos técnicos de la novela:
También se debe incluir si se trata de un libro autoconclusivo o si forma parte de una bilogía, trilogía o saga.
Ya no hablamos de los aspectos técnicos y superficiales, sino del contenido. Qué hay dentro de la historia y cómo suceden los hechos.
¡Cuidado! Hay editoriales que no te piden el resumen, así que revisa bien sus requisitos en la página web. El trabajo de investigación previo a enviar un manuscrito es imprescindible para hacer las cosas bien.
Puedes completar tu propuesta editorial añadiendo más datos de tu historia. Añade a los personajes principales, cómo funciona el mundo fantástico si tu novela es de fantasía, una lista de reproducción… Cualquier cosa que creas conveniente para este apartado, ¡añádela! La información, si es para aportar, siempre es bienvenida. Esto también incluye imágenes y edits, ¡hasta memes que hayas hecho!
Si no dibujas pero te gustaría añadir imágenes de tus personajes, siempre puedes tirar de páginas como Picrew, Azaleas Dolls o Meiker.io.
Bien, ahora que ya sabes qué debe de incluir la propuesta editorial, te estarás preguntando con qué hacerla.
Es simple, pero útil. Vuelvas toda la información, le pones un formato atractivo, añades imágenes si lo crees pertinente… ¡y listo! Muchas propuestas editoriales se hacen así, sin necesidad de otras herramientas, y funcionan perfectamente. Puede ser LibreOffice, Microsoft Word o el editor de Google Docs. ¡Incluso usar Canva en un formato A4!
Es la otra opción que tienes a tu disposición. Si bien tiene que incluir toda la información (ya que no es una presentación la uso, sino que es una propuesta editorial), el formato de power point puede ser muy llamativo y creativo. De nuevo, puedes hacer uso del programa que tengas instalado en tu ordenador, pero también optar por algunos online, como el antes mencionado Canva u otras herramientas como Prezi (aunque este no lo recomiendo tanto, ya que necesita que pagues una suscripción para poder descargar el archivo).
Lo que tienes que tener presente es que la editorial valorará la comodidad a la hora de abrir y manejar los documentos que les envías, así que te aconsejamos optar siempre por un PDF.
Esperamos que os haya servido de ayuda. No hay una sola manera de hacer una propuesta editorial, así que es posible que la práctica y el tiempo te den nuevas perspectivas o herramientas para llevarla a cabo.
Créditos de la imagen de cabecera: Foto de trabajo en computadora creado por stefamerpik – www.freepik.es
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